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  • ¿Cómo se puede contactar a Proyecto Pantano?
    Nuestro canal de contacto principal es proyectopantanoarg@gmail.com Te recomendamos explorar nuestro CANAL DE YOUTUBE con audiovisuales temáticos ¡espectaculares!
  • ¿Dónde puedo conseguir mas información para mi proyecto escolar?
    Una buena opción para explorar nuestro canal de Youtube con variadas opciones audiovisuales, podcast ¡y más! Pueden servir de soporte nuestras INFOGRAFÍAS También pueden contactar a las personas especialistas en educación ambiental de Proyecto Pantano, escribiendo a proyectopantano.educación@gmail.com
  • ¿Cuáles son los principales resultados del proyecto de estos años?
    En la sección principal de nuestra web, encontrarás detalles de algunos de nuestros importantes logros, pero a continuación detallamos lo siguiente: Descubrimos que la tendencia poblacional del Ciervo de los Pantanos en el Delta del Paraná ¡está en aumento! Generamos conocimiento clave sobre su alimentación, ya que se asumía que se alimentaba de los árboles de las plantaciones forestales. ¡Constatamos que los ciervos prefieren otras plantas!. También trabajamos en métodos de disuasión, para evitar que los ciervos dañen la corteza de los sauces y álamos que se cultivan en el delta; Investigamos el estado genetico de la población de ciervos del delta y del resto del país. Descubrimos que son iguales pero diferentes. Desarrollamos audiovisuales de calidad, para la difusión y conocimiento de la especie; Aportamos a la implementación del Parque Nacional Ciervo de los Pantanos de la Administración de Parques Nacionales; Estudiamos y difundimos conocimiento científico sobre la ecologia de la especie (sus interrelaciones con el paisaje del Delta del Paraná ; Asesoramos a una empresa forestal durante el proceso de obtención de la certificación FSC Servicios Ecosistémicos, por su rol en la conservación del ciervo de los pantanos. Esta certificación de gestión forestal, acreditada por el Consejo de la Administración Forestal (FSC™), garantiza a sus compradores que la madera procede de bosques donde se evalúa y certifica que su gestión es conforme con los estándares sociales, económicos y medioambientales correctos. Quieres saber más? CONTACTO proyectopantanoarg@gmail.com
  • ¿Los perros atentan contra el ciervo de los pantanos en el Delta del Paraná?
    El perro con y sin dueño es capaz de recorrer grandes áreas cuando, se le permite circular libremente. De esta manera, los perros urbanos o suburbanos recorren grandes distancias incursionando en áreas rurales y afectando a la fauna silvestre en especial. Los perros son portadores de enfermedades como distemper o moquillo, leishmaniasis, neosporosis bovina, parvovirus, rabia, hidatidosis y algunas de estas, no afectan a los humanos pero sí a las especies silvestres. Instintivamente -hasta los perros más domesticados-, se comportan como depredadores Este comportamiento incluye persecución, hostigamiento de la presa y ataque directo. Se ha registrado la presencia de perros dentro de áreas protegidas, provenientes de distancias lejanas. Los mismos provenían de áreas urbanas, suburbanas o puestos de establecimientos rurales que se encontraban entre 10 y 30 km del lugar del área protegida -refugio de fauna silvestre-. Se cree que nuestra fauna nativa no ha evolucionado con predadores que actúan en manada como los perros (o lobos), por lo que no generaron estrategias de escape eficientes. Los cérvidos sudamericanos son muy afectados por algo llamado miopatía de captura (estrés extremo ante peligros o persecuciones prolongadas), causándoles la muerte. Por lo que aún cuando los perros no los alcancen, estos pueden terminar afectados mortalmente. Empezando por casa La tenencia responsable de nuestros perros y gatos es importante, y dentro de lo que asumimos como tenencia responsable de mascotas entra no sólo todo lo referente a su cuidado sino también, asumir responsablemente los impactos hacia el resto de la fauna silvestre que podría estar siendo afectada. Así que: tengamos a nuestros perros vacunados y con chequeo veterinario periódico y por otro lado dentro de nuestros hogares. Los perros no pueden estar “sueltos”. Si no tenemos cerrado apropiadamente nuestro predio los perros saldrán, y si salen persiguen, hostigan y matan fauna silvestre por instinto. Puede ser un cuis, un lagarto o una comadreja en áreas suburbanas, pero cuando entran en contacto con áreas naturales, la lista aumenta enormemente. Se ha documentado que perros libres han matado no sólo crías y juveniles de ciervo de los pantanos, sino también ejemplares adultos. No se si es mi caso, lo mantengo bien alimentado…. Está muy bien, aunque eso no asegura que no mate ni hostigue a otros animales. Cuando atacan no sólo lo hacen por hambre, sino que al ser comportamiento instintivo lo harán igualmente. Un perro suelto bien alimentado tiene la energía suficiente para generar impacto en la vida silvestre. Muy preocupante, pero por suerte tengo un perro que no persigue ni mata fauna silvestre. Es muy probable que estés en un error, la única manera de asegurar que nuestro perro no afecta a la fauna silvestre es que no pueda salir del parquizado de tu casa y esto se logra cuando los perros duermen en caniles o bien el predio está apropiadamente cerrado. Todos los que tenemos perros y los queremos, creemos que nuestro perro es bueno y por lo tanto no afecta a nadie. Pero, en este caso, nos olvidamos de nuestro rol como propietarios y responsables de nuestras mascotas. Para tener mascotas y no afectar a otros animales hay que ocuparse, no sólo preocuparse.
  • ¿Por qué los ciervos del delta son iguales que el resto de los ciervos de los pantanos, pero diferentes?
    Los ciervos de los pantanos del Delta del Paraná, permanecieron aislados de las otras poblaciones de su especie debido a un desierto de arena con dunas gigantes que existió en Sudamérica durante el período que se conoce como El último Máximo Glacial (hace entre 21 mil y 18 mil años). Durante ese tiempo el ADN de las mitocondrias de los ciervos del Delta se fue diferenciando del ADN mitocondrial de los ciervos del resto de Sudamérica. La historia ocurrida durante el último máximo glacial se evidencia en el ADN con los ciervos de uno y otro lado como “iguales y diferentes a la vez”. Las mitocondrias del Delta siguen mostrando la marca de esa diferenciación por el tiempo de aislamiento, mientras que el ADN llamado “nuclear”, sigue siendo muy parecido entre poblaciones. Luego de que desapareciera este desierto, los ciervos fueron avanzando nuevamente por los márgenes del Río Paraná y volvieron a conectarse norte y sur. Esta nueva “mezcla” de individuos del Delta con otros individuos -por ejemplo los ciervos de los pantanos del Iberá- “homogeneizó” – los volvió más similares en sus genes a las poblaciones, entre sí -. En las últimas décadas, estamos siendo testigos de una nueva separación de las poblaciones de ciervo, debido a cuestiones antrópicas –crecimiento de ciudades, rutas, cultivos, fragmentación del humedal, entre otros- . Los rombos azules representan las poblaciones de ciervos que se estudiaron desde Proyecto Pantano. De norte a sur: Delta, Iberá, Mato Grosso (derecha), Pantanal Boliviano (izquierda). La parte roja señala el antiguo desierto de arena. ¿En que los afecta el cambio en el paisaje a nivel genético? En el Delta del Paraná la modificación del hábitat creó una barrera muy fuerte entre los ciervos del Núcleo Forestal y los ciervos del Frente de Avance hacia el sur. Esto restringe las posibilidades de migración de los individuos. Un ciervo que quiera migrar, por ejemplo, desde el Núcleo Forestal en el partido de Campana (provincia de Buenos Aires) hasta el Frente de Avance, a la altura de la localidad de San Fernando en la provincia de Buenos Aires, tiene que irse hasta Entre Ríos. El efecto que esta barrera tiene para los ciervos de los pantanos es que se observa en la actualidad una incipiente diferenciación genética entre ambas zonas del Delta del Paraná. La falta de conectividad a largo plazo, provoca que las poblaciones se vuelvan cada vez más pequeñas, los individuos empiezan a estar cada vez más emparentados entre sí, y a medida que se cruzan entre “parientes” (lo que se conoce como “endogamia”). Comienzan a desenmascararse enfermedades por falta de variabilidad o “riqueza” genética en la población. Muchas veces me preguntan ¿De dónde sacaste el ADN para los análisis? En las salidas de campo se colectaron las fecas (excrementos) del Ciervo de los Pantanos. Cuando pasan por el intestino del ciervo, van arrastrando células que quedan recubriendo la parte externa. Estas se pueden recuperar mediante un proceso de laboratorio y de ahí extraer el ADN.
  • ¿La CAZA FURTIVA y los INCENDIOS amenazan a la población de ciervos en el Delta del Paraná?
    En la siguiente publicación de prensa, podrás observar en detalle: "Los cazadores no hacen cuarentena y tampoco sus presas" Tiempo Argentino 05/07/2020 Por: Luciana Rosende @lucianamagali La compartimos a continuación: Desde que la pandemia de coronavirus llegó para alterar al mundo en todos sus aspectos, circularon imágenes de especies silvestres deambulando libremente por ámbitos deshabitados por las cuarentenas en distintos puntos del planeta, aun donde era impensado verlas. Muchas eran fake news. Y otras, escenas verídicas. En la zona del Delta del Paraná, ese tipo de postales no muestra una realidad cabal. Se ven más animales, sí, pero también más cazadores. Con las autoridades y los controles enfocados en la emergencia sanitaria, una especie en peligro de extinción como el ciervo de los pantanos quedó más expuesta a la caza furtiva y sus consecuencias. “Me preocupa esa mirada romántica porque es medio ingenua. Estamos viviendo algo totalmente distinto. Este respiro que estaría teniendo la naturaleza no incide en cuánto aumenta o disminuye la población. Eso hay que mirar en una especie amenazada. Uno puede ver un ciervo donde antes no se veía, pero eso es comportamental, no poblacional”, explica el biólogo Bernardo Lartigau, miembro de la Asociación para la Conservación y el Estudio de la Naturaleza (ACEN). “El problema es que de la extinción no se vuelve”, alerta. El ciervo de los pantanos, que habita en el Delta, está considerado en peligro de extinción por la Sociedad Argentina para el Estudio de los Mamíferos. Para protegerlo, se lo declaró monumento natural de la provincia de Buenos Aires (Ley 12.209). Es el ciervo autóctono más grande de América del Sur y uno de los tres ciervos anfibios del mundo. Su cacería nunca se detuvo, pero en los últimos años hubo campañas y programas especialmente orientados a su protección. En plena pandemia y cuarentena, los especialistas dan la voz de alarma. “La caza del ciervo de los pantanos y de otras especies sigue siendo muy frecuente en el Delta, porque allí hay mucha necesidad y porque los controles para evitarla nunca fueron prioridad. En estos meses fue habitual escuchar la idea romántica de los animalitos recuperándose y vagando libremente por los campos. Eso remite a un cuento de hadas, pero en el fondo es una pesadilla”, alerta el biólogo Javier Pereira, investigador del Conicet y referente de Proyecto Pantano, un plan de conservación para el ciervo del que participan investigadores de universidades y varias ONG. “Cuando empezó el aislamiento social obligatorio, buena parte del personal de seguridad y de las dependencias con injerencia en la conservación de la naturaleza del Delta fue asignada a tareas relacionadas al manejo de la pandemia, lo que acentuó aun más la histórica deuda de protección que ha caracterizado a este humedal. Muchos habitantes de las islas permanecieron en aislamiento en sus casas y, aprovechando el poco movimiento de gente, los animales comenzaron a hacerse más visibles, buscando alimento en sitios más expuestos, que normalmente evitaban. Todo eso se transformó en un combo explosivo”, describe Pereira, y resume: “Animales más visibles, gente menos presente y escaso o nulo control por parte de las autoridades, es el escenario ideal para cazadores que buscan aprovisionarse de carne”. “La fauna no se está recuperando –reafirma Lartigau–. Al contrario: se liberan zonas y se están haciendo desastres. Hay isleños que lo hacen por una cuestión cultural, y también gente que viene de afuera, que caza para consumo propio o para comerciar”. Crisis y necesidad Productores locales, conservacionistas e investigadores dan cuenta de distintos factores detrás de la caza furtiva de ciervos y otras especies, como el carpincho (ver recuadro), en el Delta del Paraná, combinados en distintas proporciones, difícilmente medibles. Hay cuestiones culturales y comerciales, pero también de necesidad económica, agravada por la crisis pandémica. “Los pibes suspendidos de las industrias o algunos despedidos van y se ponen a ranchear. Uno de los factores es la necesidad económica, pero también nos pasó que nos matan un torito y no se llevan toda la carne, eso no es necesidad”, dice Darío Ceballos, director del INTA Delta, donde han sufrido robos de vacas. “Lamentablemente, hay un circuito de venta ilegal en los barrios. La carne llega a la tarde, la limpian y están vendiendo a 2500 pesos los diez kilos. Ahí sí hay una necesidad y se vende”. “Donde hay más población vulnerable, muchos vuelven a recurrir a la isla. Ahí, los municipios, la Prefectura, el propio INTA, estamos dando mucha asistencia en este momento. Llevamos semillas, pollitos, tratamos de relevar el conjunto de las necesidades. Pero la isla es medio tierra de nadie”, describe Ceballos. “Toda el área ganadera de Campana y San Fernando está sufriendo mayor robo y carneada de animales”, asegura un productor que prefiere mantener su identidad en reserva. “En el Delta hay mucho menos movimiento, ves los ríos en los que no pasa nadie, no pasan lanchas. La situación de pandemia afectó la producción y tampoco se ve mucha gente moviéndose para ir a trabajar o barcos madereros. Lo que se ve por las redes sociales es gente que quizás siempre ha cazado, pero ahora puede que se animen a publicarlo”, dice sobre la difusión de fotos y videos con quienes alardean de sus presas. “En general, actúan muy temprano a la mañana o a partir de media tarde. De noche, no, porque los ríos están muy bajos y no se puede circular ni con una canoa”, cuenta el productor. Manuel Vázquez, guardaparque abocado a la protección del ciervo de los pantanos, apunta que “no se da sólo de noche el ingreso a los predios donde se caza. Se hace también de día. Vemos un cambio en eso, y lo relacionamos con la deficiencia de los controles en este marco de pandemia. En algún punto, el incremento de la caza puede estar relacionado con el aumento del costo de vida en el lugar, donde siempre es más difícil conseguir recursos y adquirir los elementos básicos para vivir, por el aumento del costo de los fletes y demás. Hay personas que se han quedado sin recursos por la pandemia”. “La caza en el Delta seguirá, el tema es que no se desmadre de un modo tal que no se pueda volver atrás”, alerta el biólogo Lartigau. Y pone el foco en la especie en peligro de extinción a la que dedica su trabajo: “Este ciervo, cuando se le liberan las presiones que tiene, se puede recuperar. El problema es que no lo estamos dejando. Los guardaparques que se ocupan del ciervo son dos. Y ahora, activo, uno solo. No tienen medios para llegar cuando se hacen las denuncias. Sin recursos, sin personal apropiado para semejante territorio, la realidad es que al ciervo no lo estamos conservando”. Incendios provocados para salir a cazar Los incendios que arrasan extensas zonas del sur de la provincia de Santa Fe, producto de las quemas que fomentan los productores ganaderos, no son los únicos por estos días. En la zona del Delta del Paraná también se registraron focos alarmantes, aunque las motivaciones son otras. “Los incendios que tenemos acá básicamente son generados por los que salen a ranchear o a cazar. Los que salen en los diarios son los que llegaron a Rosario, en el norte. Pero la semana pasada acá se quemaron 60 hectáreas del Parque Nacional Ciervo de los Pantanos. Es la gente que sale a cazar”, afirma Darío Ceballos, de INTA Delta. El parque, en el partido de Campana, fue creado por una ley de 2018 e integra las reservas naturales Otamendi y Río Luján.
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